Con un efecto opulente e impresionante, el vidrio esmerilado es difícil de instalar y mantener. Moldear el vidrio esmerilado es virtualmente imposible. Y limpiarlo puede ser problemático.
En cambio, las películas de embellecimiento para cristales Llumar pueden replicar la apariencia y textura del vidrio esmerilado por una fracción de su precio, y pueden ser limpiados con limpia ventanas comunes. También es fácil de cambiar, permitiéndole poner al día su imagen sin necesidad de reemplazar sus cristales.